Cuidados, recomendaciones y consejos después de cirugía oral
La cirugía oral es la cirugía que se realiza en la boca, los dientes, las encías y la mandíbula. La cirugía oral más común es la extracción dental, que consiste en extraer un diente debido a que, normalmente, está muy cariado o a una enfermedad de las encías. A veces, se extraen varios dientes o se sustituye una pieza dental que falta, a lo que se denomina procedimiento de implante dental.
Toda intervención quirúrgica oral conlleva un periodo de recuperación. Para que el proceso de cicatrización transcurra de un modo óptimo y que no haya complicaciones, como una infección, es importante seguir con atención y precisión las instrucciones postoperatorias del cirujano.
¿Qué debes hacer después de una cirugía oral?
Si quieres saber cuáles son los consejos y cuidados más importantes después de una cirugía oral, estas son nuestras recomendaciones principales.
Ten paciencia
Descansa en casa y evita la actividad física. Es normal que notes molestias, y que tengas ganas de hacer vida normal, pero todavía no es el momento. Mantén la cabeza apoyada sobre unas almohadas para reducir la hinchazón y la hemorragia.
Aplica compresas de hielo
Las compresas de hielo son muy útiles para contener la hinchazón. Aplícatelas durante 15 minutos y luego descansa. Puedes repetir esta operación a lo largo del día, aunque no de modo muy prolongado, y deteniéndote si notas molestias.
Come alimentos blandos
Durante los días siguientes a la operación, es mejor que tomes alimentos blandos y, a ser posible, que no necesiten masticarse y, a ser posible que tampoco estén calientes. Lo idóneo podrían ser, yogures, batidos de frutas, helados…
Toma la medicación prescrita
Si tu dentista o cirujano te dan una receta con medicamentos, sobre todo si son antibióticos, sigue de manera estricta sus indicaciones, ya que son parte importante del tratamiento completo para que la cirugía surta sus efectos.
Cuida la higiene de tu boca.
Cuando hayan pasado 24 horas, enjuágate suavemente con agua salada tibia (una cucharadita de sal en un vaso de agua tibia) cuatro veces al día. Asegúrate de hacerlo después de cada comida, para que el agua elimine cualquier resto de alimentos alrededor de la zona intervenida.
Cepíllate con cuidado
Se puede cepillar el resto de los dientes con normalidad y no tocar con el cepillo la zona de la cirugía. En caso de que haya algún resto de comida en la zona intervenida, se debe usar un cepillo muy blando y, a continuación, enjuagarse con suero salino o agua con sal. Por último, se debe secar la zona de la herida con una gasa estéril y gel de clorhexidrina.
¿Qué no debes hacer después de una cirugía oral?
También hay unas recomendaciones que queremos indicar sobre cosas que se tienen que evitar, incidiendo en la precaución.
No hagas esfuerzos excesivos
El ejercicio físico puede conllevar un aumento del flujo sanguíneo, pero esto puede provocar que los coágulos de sangre que se forman mientras se cura la boca se rompan.
No tomes comidas ni bebidas calientes
Esto es importante, sobre todo mientras permanecen los efectos de la anestesia, ya la zona carece de sensibilidad y te puedes quemar. Además, los alimentos calientes también pueden perjudicar los alivios en las zonas hinchadas, que requieren de frío para su mejora.
No comas alimentos duros o crujientes
Esto es para evitar daños en la zona operada. Las comidas duras, los alimentos crujientes o las recetas picantes pueden no ser los mejores acompañantes para una boca en un postoperatorio.
No fumes ni bebas alcohol
Aunque esto son recomendaciones que se deberían indicar todo el tiempo, el tabaco y el alcohol son especialmente incompatibles con los procesos de cicatrización en las cirugías de la boca.
En conclusión, solo tienes que seguir las indicaciones que te dará tu dentista para las horas y días posteriores a la cirugía. El periodo en el que tendrás que tener cuidado con lo que haces y comes dependerá principalmente del tipo de cirugía. Y si notas que el dolor persiste o aumenta a pesar de la medicación, que tienes fiebre prolongada, problemas para tragar o respirar o algún otro síntoma llamativo, no dudes en contactar con él o acudir a tu médico de urgencias.